Cuestionario Fiat Lux
Llenaríamos muchas pantallas enumerando obras, premios y hazañas del maestro Andreu Martín. Maestro, precisamente, es la palabra que mejor y más acertadamente lo sintetiza. Y ahí nos vamos a enrocar.
Un enroque feliz y pinturero porque tenemos el gran honor y el enorme placer de anunciarles que Andreu Martín comienza a colaborar con Fiat Lux. Un lujazo.
El debut tendrá lugar dentro de muy pocos días, en el número #08 de la revista, con una terapia a fondo a la novela negra en conversación con los también muy grandes Julián Ibáñez, Carlos Zanón y Alexis Ravelo. A la espera del acontecimiento, Andreu Martín pasa por la sala de interrogatorios para responder al #CuestionarioFiatLux dejando un buen manojo de muy interesantes reflexiones, algún que otro mandamiento y varios secretos, y curiosidades: “No me gusta el bolígrafo”.
Fiat Lux. ¿Por qué le dio por escribir novela negra?
Andreu Martín. Últimamente, he llegado a la conclusión de que, más allá de las lecturas infantiles, mucho antes, mi padre forjó en mí una especie de mitología policíaca.
FL. En el juego de policías y ladrones, ¿con quién iba?
AM. Indistintamente, con quien me tocara. Perseguía o salía corriendo.
FL. Tiene licencia novelesca para matar / Tenemos licencia literaria así que no se corte: ¿A quién mataría?
AM. A los personajes que mato, exactamente. A lo que ellos representan. Y lloro cuando las víctimas son inocentes.
FL. ¿Qué o a quién atracaría?
AM. No atracaría.
FL. Si fuese detective, investigador, sabueso…, ¿quién o quiénes sería/serían su/sus modelo/modelos?
AM. La gente que conozco de la Policía Científica.
FL. Si fuera criminal, desde asesino a atracador, valen todos los palos, ¿quién o quiénes sería/serían su/sus modelo/modelos?
AM. No sería criminal.
FL. Díganos su escritor o escritores del negociado negrocriminal preferido/preferidos, y su/sus porqué/porqués
AM. Eso varía continuamente. Ahora todavía estoy bajo los efectos de los dos libros de Daniel Woodrell Un invierno de huesos y La muerte del pequeño Shug. Crea y recrea un mundo emocionante.
FL. ¿Qué noticia, asunto de actualidad, ve o vería como argumento para novela negra? // ¿Y cómo podría ser o sería el planteamiento?
AM. Abro el periódico al azar. Una teniente de alcalde detenida en un ayuntamiento catalán por corrupción política relacionada con Sanidad. Cuando la policía va a detenerla, encuentran que se ha suicidado y ha dejado una carta comprometedora. Naturalmente, la teniente de alcalde no sería corrupta, no se habría suicidado y detrás de todo ello se escondería la mano negra de las industrias farmacéuticas. O sea que, así, improvisando, me saldría una novela vulgar.
FL. ¿Por qué se escribe tanta novela negra?
AM. Porque proporciona placer, catarsis de nuestros miedos y un análisis profundo de la sociedad que nos rodea.
FL. ¿Por qué se compra o se lee tanta novela negra?
AM. Porque proporciona placer, catarsis de nuestros miedos y un análisis profundo de la sociedad que nos rodea.
FL. ¿Usted qué piensa, que se lee novela negra por envidia (del bueno o del malo) o para aprender (a ser malos o a descubrir malos)?
AM. No entiendo la pregunta. No se me había ocurrido que se pudiera leer por envidia ni para aprender a ser malos. Se lee por placer.
FL. ¿Todos somos un poco (o un mucho) criminales?
AM. Todos llevamos dentro la transgresión, claro que sí. Se le llama libertad. Podemos actuar bien o mal, nosotros elegimos.
FL. Puestos a elegir, ¿usted sería el criminal o el detective, el asesino o el policía, el ladrón o el investigador?
AM. El detective, el policía, el investigador.
FL. Dígame una ciudad para cometer un delito
AM. Cualquiera pero, ya que puedo elegir, Sydney, que está bastante lejos de donde vivo.
FL. Cine Negro: una película (o unas películas)
AM. Chinatown de Polaski, Fargo de los Coen, Sexy Beast de Nomeacuerdoquién.
FL. Póngame una banda sonora para leer novela negra
AM. Vértigo, de Dani Nel·lo.
FL. ¿Usted se pone música para escribir? ¿Qué música?
AM. Según la novela, Según las necesidades de ambientación. Cada vez escucho menos música.
FL. ¿Cómo es su espacio de trabajo?
AM. Caótico.
FL. ¿Cómo escribe; cuándo; cuánto…?
AM. Tanto como puedo y lo que la vida me permite. Es mi única vida. Escribo en el autobús, en el metro, en el tren, en la sala de espera del dentista y, a veces, en mi despacho.
FL. Música al margen, ¿de qué se acompaña para escribir?
AM. Libros, documentación, entusiasmo.
FL. ¿Cómo se documenta para sus novelas?
AM. De todas las maneras posibles pero, sobre todo, recurriendo a personas. Mis policías de cabecera, mis jueces de cabecera, mis forenses de cabecera, mis cocineros de cabecera, mis brujas de cabecera, mis inquisidores de cabecera.
FL. ¿Es de los que llevan una libretita siempre a mano y va anotando secuencias, ocurrencias, cachitos de inspiración? /// ¿Nos leería algo de lo último que haya escrito en esa libreta?
AM. Busco la libreta (de tapas rojas, preciosa). A ver qué puse: «GdG despierta horrorizado pensando que ha tenido un sueño herético. El Demonio es un perro rabioso y atado. Sólo es peligroso para quien se acerca a él. (S. Agustín.) GdG sueña que se aleja del perro y cada vez está más lejos hasta que vive en un mundo sin Demonio. Eso sería una herejía. (Luego, comprenderá que lleva el demonio dentro».) A ver si estoy haciendo mucho spoiler.
FL. ¿Empieza por el título o el título ya surgirá?
AM. Hay novelas que nacen con título (p.e. Prótesis, Flanagan Blues Band, Asalto a la Virreina, Chats, Los escupitajos de las cucarachas no llegan al séptimo sótano del pedestal donde se levanta mi estatua) y otras que nacen sin título (p.e., No pidas sardina fuera de temporada, La violencia justa, Si es no es). Según.
FL. ¿Corrige mucho?
AM. Tanto como haga falta. No creo que las cosas salgas bien a la primera. A mí, no.
FL. ¿Qué manías o supersticiones tiene mientras trabaja, mientras crea?
AM. No me gusta el bolígrafo.
FL. ¿Cómo se titula la novela, cuento, escrito…, que guarda en un cajón?
AM. Adiós (historia de mi suicidio).
FL. ¿En qué está trabajando ahora?
AM. En una novela sobre la caza de brujas del siglo XVII en Cataluña. Me encanta haber encontrado la figura del inquisidor bueno. (Fíjate que inquisidor es lo mismo que investigador.)
FL. ¿Qué está leyendo ahora mismo?
AM. Libros de inquisición y brujería del siglo XVII. En la mesilla de noche, nada que me interese.
FL. ¿Qué libro/libros nos recomienda, además de lo suyo?
AM. Los de Daniel Woodrell, claro.
FL. Y de la balda “rarezas y curiosidades” de su librería, ¿algún descubrimiento que quiera compartir con nosotros?
AM. Tengo muchas. Ahora, ha salido a flote el Manual de Inquisidores de Aymerich, como se comprenderá.
FL. ¿La mejor forma de matar?
AM. La que exija el guión, siempre distinta.
FL. ¿Su entretenimiento favorito?
AM. Escribir o elaborar superproducciones de YouTube, si tengo tiempo (que no tengo).