Entrevista Carlos Bassas: «¿Es imaginable un ciudadano que no posea un alma de asesino?»

Cuestionario Fiat Lux

Jiujitsu: Del japonés jūjutsu, de jū, amable, discreto, y jutsu, pericia, destreza). Arte marcial de lucha sin armas.

Iaido: Arte marcial japonés relacionado con el desenvainado y el envainado de la katana.

Eso, y la cocina, son los entretenimientos de Carlos Bassas, barcelonés pero apamplonesado irredento, experto en cine (y en Japón) y escritor de negro: acaba de fichar por Alrevés con quienes en mayo publica una nueva entrega de su Herodoto Corominas. “Mi segunda novela arranca con una frase de Emile Cioran: “¿Es imaginable un ciudadano que no posea un alma de asesino?”… Estoy con las últimas correcciones”.

Antes fue “El honor es una mortaja”, Premio Internacional de Novela Negra Ciudad de Carmona en 2013. Y entre medias, la organización de Pamplona Negra que debutó con mucha y buena pegada el pasado mes de enero.

Escribe entre tabaco y agua, sin música, rodeado de libros. Le pillamos leyendo a Jim Thompson y nos regala “El libro de las tradiciones familiares de Yagyu Munenori” (y a Víctor del Árbol en concreto con dedicatoria).

Fiat Lux. ¿Por qué le dio por escribir novela negra?
Carlos Bassas. Porque me permite dar caña.

FL. En el juego de policías y ladrones, ¿con quién iba?
CB. Yo siempre de caco si podía. Ahora me he pasado al otro bando, será la edad.

FL. Tiene licencia novelesca para matar / Tenemos licencia literaria así que no se corte: ¿A quién mataría?
CB. A nadie. Soy más de joderles día a día hasta el fin de sus días; si no, el castigo se acaba demasiado rápido.

FL. ¿Qué o a quién atracaría?
CB. Los ordenadores donde las grandes farmacéuticas guardan las patentes de determinados medicamentos, para colgarlos en internet.

FL. Si fuese detective, investigador, sabueso…, ¿quién o quiénes sería/serían su/sus modelo/modelos?
CB. Tengo un poco de todos, pero tiro hacia Pepe Carvalho.

FL. Si fuera criminal, desde asesino a atracador, valen todos los palos, ¿quién o quiénes sería/serían su/sus modelo/modelos?
CB. Moriarty imaginado y escrito por Juan Ramón Biedma.

FL. Díganos su escritor o escritores del negociado negrocriminal preferido/preferidos, y su/sus porqué/porqués.
CB. El sanedrín de la novela negra mediterránea, Vázquez Montalbán, Camilleri, Petros Markaris, Andreu Martín y González Ledesma, porque sus novelas transcurren a pie de calle y pegadas a la realidad social que les rodea en cada momento.

FL. ¿Qué noticia, asunto de actualidad, ve o vería como argumento para novela negra? // ¿Y cómo podría ser o sería el planteamiento?
CB. Un enfermo de Hepatitis C contagia al Ministro de Sanidad y le dice: ahora pierde el culo para hacerte con una caja de Sovaldi.

FL. ¿Por qué se escribe tanta novela negra?
CB. Porque te permite reflejar y criticar la realidad social que te rodea como ninguna sin sonar a panfleto.

FL. ¿Por qué se compra o se lee tanta novela negra?
CB. Porque, como dice Reyes Calderón, todos llevamos un pequeño investigador dentro.

FL. ¿Usted qué piensa, que se lee novela negra por envidia (del bueno o del malo) o para aprender (a ser malos o a descubrir malos)?
CB. Ni lo uno ni lo otro: se lee para disfrutar.

FL. ¿Todos somos un poco (o un mucho) criminales?
CB. Mi segunda novela arranca con una frase de Emile Cioran: “¿Es imaginable un ciudadano que no posea un alma de asesino?”.

FL. Puestos a elegir, ¿usted sería el criminal o el detective, el asesino o el policía, el ladrón o el investigador?
CB. El policía…, pero con ciertos afectos por lo criminal.

FL. Dígame una ciudad para cometer un delito.
CB. Ofidia.

FL. Cine Negro: una película (o unas películas).
CB. Manhattan Sur, de Cimino, y Muerte entre las flores, de los Coen.

FL. Póngame una banda sonora para leer novela negra.
CB. No me gusta leer con música.

FL. ¿Usted se pone música para escribir? ¿Qué música?
CB. El único sonido que me gusta escuchar es el de las teclas. Tiene su propio ritmo, a veces rock, a veces heavy, a veces sinfónico.

FL. ¿Cómo es su espacio de trabajo?
CB. Habitación pequeña forrada de libros. Últimamente ya han saltado hasta de las estanterías al suelo. Estoy rodeado.

FL. ¿Cómo escribe; cuándo; cuánto…?
CB. A ordenador, por las mañanas, por las tardes.

FL. Música al margen, ¿de qué se acompaña para escribir?
CB. Tabaco, y, para compensar, también de un sano botellín de agua.

FL. ¿Cómo se documenta para sus novelas?
CB. Hablando con profesionales del sector (policías, forenses, miembros de la científica…) y a través de internet.

FL. ¿Es de los que llevan una libretita siempre a mano y va anotando secuencias, ocurrencias, cachitos de inspiración? /// ¿Nos leería algo de lo último que haya escrito en esa libreta?
CB. Sí. La última anotación es: “La denuncia al Biscuter la ha puesto… (spoiler) para apartar al (spoiler). Ppo de (spolier)”.

FL. ¿Empieza por el título o el título ya surgirá?
CB. Ya surgirá. Pero necesito uno provisional al menos al ponerme a escribir.

FL. ¿Corrige mucho?
CB. Hasta la saciedad. Hasta la locura. Y aún así…

FL. ¿Qué manías o supersticiones tiene mientras trabaja, mientras crea?
CB. Ninguna…, que yo sepa.

FL. ¿Cómo se titula la novela, cuento, escrito…, que guarda en un cajón?
CB. Novela.

FL. ¿En qué está trabajando ahora?
CB. Corrigiendo la segunda entrega de mi saga del inspector Heródoto Corominas.

FL. ¿Qué está leyendo ahora mismo?
CB. Noche salvaje, de Jim Thompson. Y a la espera en mi mesilla de noche: David Llorente, Juan Ramón Biedma, Josep Camps, Jordi Ledesma, Rafa Melero, Víctor del Árbol, Empar Fernández, Rosa Ribas, más Thompson, Santiago Álvarez. Las dos últimas fueron de Biedma y de Claudio Cerdán.

FL. ¿Qué libro/libros nos recomienda, además de lo suyo?
CB. Todos los de los autores anteriores además de los de mi sanedrín, los de Juan Madrid, los de Lorenzo Silva… Solicito la reencarnación para leer todo lo que aún me queda por leer.

FL. Y de la balda “rarezas y curiosidades” de su librería, ¿algún descubrimiento que quiera compartir con nosotros?
CB. El libro de las tradiciones familiares, de Yagyu Munenori, gran espadachín y estratega japonés del s.XVII, maestro de esgrima de los tres primeros shogunes Tokugawa. Se puede encontrar en Kairós bajo el título El alma del samurái. Es una recomendación específica para Víctor del Árbol, un crack.

FL. ¿La mejor forma de matar?
CB. No hacerlo. Pero si no hay más remedio, al tuntún, sin móvil alguno. Casi, casi el crimen perfecto, como en la película Ejecutivo ejecutor.

FL. ¿Su entretenimiento favorito?
CB. Cocinar, el jiujitsu y el iaido, ambos artes marciales tradicionales japonesas.